Review
Cuatro años después del debut OPEN MIND regresa con una propuesta que dejaron macerar lo suficiente para encontrar el punto justo de equilibrio entre la fuerza y la melodía. Aunque dichas características ya se destacaban en su primer álbum, en esta ocasión se invierte el orden de prioridades. Sin perder la identidad heavy que presentó desde su fundación, la banda logra remarcar su capacidad melódica. Mediante composiciones que llevan los tiempos con delicadeza y potencia a la misma vez, aparece un aspecto de prolijidad contundente que en la urgencia del debut de años atrás quedaba disimulada. De esta manera concretan un álbum superlativo de Hevy Rock melódico con el cual logran el impulso para decidirse a funcionar ya como un grupo tradicional, presentándose en vivo. Además le suman la participación de Iván Sención (Jeriko – Watchmen) como invitado en uno de los tracks, cuestión que resalta aún más el trabajo singular de voces que hicieron siempre junto a sus dos cantantes permanentes.
Four years after of its debut OPEN MIND comes back with a proposal that they allowed to macerate enough to find the right point of balance between strength and melody. Although these features were already highlighted in their first album, this time the order of priorities is reversed. Without losing the heavy identity that it presented since its foundation, the band manages to highlight its melodic capacity. Through compositions that take time with delicacy and power at the same time, there appears an aspect of forceful prolixity that in the urgency of the debut was disguised. In this way they finalize a superlative album of melodic Heavy Rock which they achieved the impulse to decide to work as a traditional group, performing live. In addition they add the participation of Iván Sención (Jeriko – Watchmen) as a guest on one of the tracks, an issue that highlights even more the singular work of voices that they always did with their two permanent singers.